Saber identificar los momentos
y ocasiones clave es un fundamento que debemos tener presente
tanto en nuestro entorno profesional como en nuestra vida
cotidiana. Tal es su importancia, que debiera considerarse como un
hábito saludable para la vida de las personas.
Identificar los momentos y
ocasiones clave nos permite que podamos dosificar nuestra energía,
para emplearla con
intensidad cuando es adecuado hacerlo, ya que es contraproducente
mantener niveles elevados de intensidad de forma permanente, que
nos llevan más hacia el estrés que hacia un resultado eficaz. Sin
embargo, ello no debe ir en detrimento de nuestra entrega e
implicación, aspectos ambos que deben permanecer invariables.
Saber actuar en el momento
oportuno está relacionado con otras cualidades afines que
intervienen en la potenciación de dicha cualidad, como son la
visión estratégica, aprovechamiento de la oportunidad, el
autocontrol emocional y la eficiencia al servicio de nuestros
objetivos.
Los aspectos que pueden
bloquear o boicotearla son el descontrol emocional como la rabia,
la ira, la necesidad de tener razón y creer que ello está por
encima de todo lo demás, escasa o nula visión estratégica, creer
que tener una meta u objetivo es suficiente para ser eficiente,
intolerancia de la incertidumbre.
Para saber identificar el
momento clave conviene observar, estar atento, pero no estar con
todo el mecanismo activado mientras tanto. Mientras se está en el
periodo de observación es cuando hay que ir reponiendo nuestra
energía, preparándose para que cuando llegue el momento estemos a
punto y no desgastados. Sin ir más lejos, podemos observar la vida
de los animales como, el halcón o el jaguar. Ambos son cazadores,
pero no se lanzan a correr tras cualquier animal viviente para
atacarlos, ni lo hacen en cualquier momento. El halcón tiene un
vuelo calmado, similar al de cualquier paloma, pero cuando ha
observado su presa y ve la oportunidad, se lanza a una velocidad
que alcanza los 180 km/h. El jaguar no caza a cualquier hora del
día, lo hace al amanecer y al atardecer, por ejemplo.
Tanto el halcón como el jaguar
actúan en momentos y ocasiones clave: cuando se sienten amenazados
y cuando tienen hambre. ¿Has pensado cuáles son para ti los
momentos clave?
En mi experiencia profesional
cuando trabajaba en empresas, he visto muchas ocasiones clave
desperdiciadas por mis compañeros, por ejemplo, no cuidar la
imagen cuando te presentas ante un cliente o un manager, asistir a
una comida de empresa y beber más de la cuenta, contar chismes o
dar información que luego ha llegado a manos inapropiadas y les ha
llevado a pagar consecuencias por ello, no aprovechar la
oportunidad de conocer al responsable de un área al que de otra
forma no tendrías acceso, etc.
En mi experiencia como coach,
he visto como muchas personas ven difícil tener la paciencia que
requiere la espera de determinados acontecimientos, aun sabiendo a
priori que esperar les favorece… Hay personas que no paran de
hacer cosas, tienen una fuerte motivación y activación mental,
pero para esas personas es importante que aprendan a parar, a
dosificarse, a ser pragmáticos, a intentar que su nivel de
activación y motivación esté en un nivel que no vaya en contra en
su rendimiento y para ello es importante que comprendan que para
conseguir sus objetivos es preciso aprender a identificar los
momentos y ocasiones clave.
Esta cualidad forma parte del
Nuevo Management.