Las empresas no forman parte de las votaciones democráticas de los
gobiernos, sí lo hacen las personas como particulares. Me planteo
como un país puede promover el empleo sin contar con las empresas
u organizaciones, entre otros ámbitos, cuando constituyen su
gobierno.
Los gobiernos se instauran desde la llamada democracia mediante el
voto de las personas particulares mayores de 18 años. No se tiene
en cuenta nada más que eso a la hora de pedir una consulta, sea
electoral o referéndum, ya que se considera que el voto es un
derecho de las personas, pero no de las organizaciones.
Así, se instaura un sistema de gobierno que tiene el consenso de
aquellos que votan únicamente, que son aproximadamente el 50% en
el mejor de los casos. El otro 50% no vota, aunque nadie se
preocupa de saber el porqué, de hecho da igual, porque el gobierno
impone un sistema y luego se renueva con quien les vote, aunque
sólo sea un % muy pequeño. Las decisiones que tomen serán para
todos: votantes y no votantes. Los que votan, para el gobierno,
son responsables y forman parte del sistema… véase que no es el
sistema el que forma parte de las personas responsables.
Ahora, en esta etapa de cambios, la sociedad es más responsable y
tiene mayor iniciativa, es más exigente y no le gusta que su
futuro esté en manos de una minoría privilegiada y corrupta. Eso
sí, el sistema se resiste a perder sus privilegios y exige que
cualquier cambio que se produzca parta del sistema ya establecido.
También el sistema protege a sus
aforados, de forma que nadie les rinda cuenta a los errores que
hayan cometido. En España, por ejemplo, se dice que la ley es
igual para todos, sin embargo, blinda a unos personajes mediante
el aforamiento, sobretodo, los aforados son políticos y no
ejecutivos de grandes empresas (unas 10.000 autoridades públicas).
En los gobiernos suelen darse errores de incompetencia que afectan
a todo el país. Sin embargo, los incompetentes no suelen hacerse
cargo del problema que generan ya que saben muy bien como culpar a
otros, culpan a otros partidos políticos o incluso a las reglas o
leyes que fueron creadas por ellos mismos. Una vez finalizado el
periodo de mandato, los incompetentes siguen participando del
gobierno del país, no son despedidos ni amonestados; incluso
algunos, aprovechan la ventaja de haber sido personajes públicos
para tener altos cargos en compañías privadas.
Estos gobiernos actuales llamados demócratas, deciden e influyen
en todos los ámbitos de la vida de las personas, sin embargo, en
la administración de dichos ámbitos se han cometido delitos sin
que ello tenga una gran repercusión. Por ejemplo, apropiación
indebida de dinero público, un dinero que no se repone aunque se
descubra el fraude. ¿Cuántos miles de millones han robado los
corruptos políticos?
Como reacción a la crisis, los gobernantes decidieron aumentar
brutalmente la deuda pública y después aumentar en consecuencia,
de forma desmedida, los impuestos a particulares y organizaciones,
para pagar la desmedida deuda. Muchos piensan que también para
reponer lo que ellos robaron de los fondos públicos.
En cuanto al ámbito del trabajo se habla de fomentar el empleo. El
gobierno dispone mediante impuestos al trabajo de una recaudación
destinada, entre otras cosas, a la gestión de pensiones que
permitan ingresos a quienes no trabajan, sea por discapacidad,
jubilación o desempleo. Con la crisis, debido a las cifras
elevadas de desempleados, se habla de fomentar el empleo. Otra
vez, en mi opinión, el gobierno se mete en camisas de once varas…
Por un lado, las organizaciones (con o sin ánimo de lucro,
incluyendo pequeñas y medianas empresas) contribuyen mediante sus
impuestos al mantenimiento del gobierno pero no contribuyeron con
su voto. El sistema no pide ser elegido con el voto del sector
empresarial, pero le exige contribuciones. En mi opinión, los
sistemas actuales de gobierno demócratas no consultan ni piden el
apoyo del sector empresarial, cuando dicho sector tiene mucho que
ver con la generación de empleo y formación así como con el
progreso y crecimiento económico.
Visto según mi enfoque, para tener realmente sistemas de gobiernos
equitativos o democráticos, realmente representativos, no sólo
deberían participar algunas personas en sus elecciones, sino
también todos los componentes de cada ámbito privado: empresas,
sanidad, educación, etc. Otra alternativa, ya que la incompetencia
de los gobiernos está demostrada y se quiere seguir viendo como la
única opción, puede consistir en que en lugar de un gobierno único
formado por políticos, sean personas civiles, que no sean
políticas, representantes de cada ámbito de la sociedad que
articule responsablemente la administración y buena gestión del
sistema, con elementos de control que garanticen el uso adecuado
de los bienes y derechos públicos.
Ante la demostrada incompetencia política, en estos últimos años,
millones de personas están participando en movimientos sociales
que exigen la aportación de la sociedad civil en las decisiones
gubernamentales.
Nuevo Management
impulsa la revisión de sistemas y escenarios para construir
progreso en la humanidad, donde personas, empresas y sociedad
participen del cambio alineando sus intereses en base a las
exigencias de la actual Era de la información.