Los recientes acontecimientos sucedidos en Cataluña (España), ante
un intento hoy por hoy fallido de una declaración de independencia
por parte del gobierno catalán, han producido la huida de más de
mil empresas.
Las empresas huyen de la inestabilidad política de los países. Es
lógico, ¿no?
Como apuntamos en la parte 1 de este artículo -publicado en
Octubre de 2017 en este medio- para evaluar el grado de éxito o
fracaso de la prosperidad de un país, se utiliza el PIB (Producto
Interior Bruto) y la deuda pública adquirida. También comentamos
que éste factor no era del todo completo por no tener en cuenta
otros aspectos relacionados directamente con los individuos:
educación, empleo, nivel de corrupción, sanidad, entre otros,
haciendo falta que dichos factores se añadan al valor del PIB para
tener un dato global más amplio sobre la realidad de un país.
Lo que ha pasado en Cataluña pone de manifiesto que es necesaria
la alineación entre empresas, sociedad y personas, pues el sector
político no ha tenido en cuenta a las empresas a la hora de
plantear independizarse de España, resultando en consecuencia una
mayor inestabilidad para la sociedad catalana.
Parece de libro que se deba contar con las empresas para
proyectarse hacia un futuro próspero; sin embargo, el modelo de
los gobiernos actuales, basado en el voto de la población para
elegir el sistema de gobierno, sigue sin tener en cuenta el
parecer del mundo empresarial.
Pero las empresas hablan a través de su proceder. Frenan sus
inversiones, trasladan sus sedes, y otras paralizan su
productividad a la espera de acontecimientos. Se precisa de
estabilidad para que los mercados sean rentables.
Es preocupante que los líderes políticos
no tengan una visión sistémica sobre lo que es importante
para su país, así como para el resto de países, y prevalezca su
poder de decisión que justifican con el voto recibido de las
masas. Tal vez se podría decir que son ignorantes, o que esperan
que el mundo se adapte a sus decisiones porque tienen el poder.
Pero el mundo también lo construye el mundo empresarial, que es
quienes crean el tejido y la base de una economía con la que
prospera la sociedad.
En este siglo 21, Era de la información, estos acontecimientos
mencionados en Cataluña deben servirnos como un ejemplo, y por
ello me he referido a ellos en este artículo,
para que se tome conciencia
de la importancia de tener una visión sistémica del mundo. De no
pensar tanto en anclajes emocionales de la historia de un país y
mirar más hacia el futuro partiendo de cómo es hoy este mundo y
cómo queremos que sea,
pensando en el bien común, en sociedades justas y en una mejor
calidad de vida.
Ya no somos como fuimos en un pasado. Las sociedades cambian, las
personas cambian, las empresas cambian y no podemos mirar tan
atrás para dar pasos hacia adelante. Gira el mundo, gira.
Para ser independiente, cualquier persona que se haya
independizado lo sabe, se necesitan unos ingresos estables, o sea,
un trabajo. Porque independizarse sin tener suficientes ingresos
te lleva a la precariedad, o a vivir de los demás. La idea de que
se es libre por independizarse es una falacia. Se es libre de unas
cosas y se es más dependiente que nunca de otras. Entiendo el
momento en que uno se considera capaz de romper ataduras y
librarse de ellas, o querer ser económicamente autosuficiente,
pero es mejor teniendo un plan y apoyo... que solo. Si esto lo
trasladamos a la población catalana, sería lo mismo. No se
independicen sin un plan, sin el apoyo empresarial, sin el apoyo
de la mayoría de las personas, ni de otros países, porque los
países no prosperan siendo autosuficientes.
Nuevo Management
contribuye a producir los cambios en la sociedad, las
organizaciones y las personas, construyendo un futuro acorde a la
actual Era, también llamada del conocimiento. Reconceptualizando,
revisando y cambiando la inercia para alinear los intereses de las
personas, las empresas y la sociedad; centrándonos en las personas
para que puedan crear,
consultar, utilizar la información y el conocimiento, forma parte
de los aspectos fundamentales que
Nuevo Management considera valiosos y acordes con la actual Era de
la información para el progreso de la humanidad.